En la recepción de la planta de envasado recibimos y verificamos la calidad de la sal refinada, que una vez que obtiene el conforme, pasa a las líneas de envasado.
Cuando la sal ya se encuentra en sus respectivos envases, preparamos diferentes tipos de empaquetado y paletizado, adaptados a las necesidades del cliente final, para que reciba el producto de la forma más cómoda para su almacenamiento y uso.
Se realiza un exhaustivo control de calidad al producto terminado y se dispone del más avanzados sistema de trazabilidad informatizado.